Debido a la situación laboral que había cuando acabé mis estudios y mi periodo de becaria, sólo tenía dos caminos: coger la maleta y buscar oportunidades en el extranjero o autoemplearme. Fue entonces cuando fundé mi propia agencia de comunicación de Moda.

Lo que ganaba apenas me daba para pagar los gastos hasta que me di cuenta de que realmente los clientes querían trabajar conmigo por recomendación personal, más que como agencia. Así que decidí hacer un experimento: crear mi propia web como marca personal a la vez que me ofrecía por otro lado como agencia.

¡Los resultados fueron alucinantes! En menos de 6 meses ya triplicaba mi lista de clientes con mi negocio de marca personal. Estaba claro, debía enfocarme en mí como Ana Jmnez.

¿Y por qué Marca Personal y no Marca Comercial? Las personas conectamos con personas, sobre todo si nos sentimos identificados con ellas en algún aspecto. La barrera digital, si hay alguien detrás al que le ponemos cara, desaparece y se crea confianza.

Nuestros clientes virtuales no nos conocen y apuestan por nosotros por la percepción que tienen de nosotros, y esto sucede gracias a nuestra imagen y textos persuasivos.